lunes, 29 de septiembre de 2014

EL DILEMA DEL 5 DE NOVIEMBRE: ¿A QUÉ APOSTAR?



CARTA ABIERTA DE MANUEL A LIMA
(Primera Parte)

28 de setiembre de 2014

Sr. Manuel Velásquez:

            Con fecha 25 de setiembre usted ha divulgado por varios grupos de correo un texto al cual ha titulado Carta Abierta de Susana a Lima. Opinión  (ver más abajo la trascripción del texto). En ese documento usted hace un intento de análisis concreto de la fase final de la presente lucha electoral municipal. Me parece muy bien.


ASUMIR UNA POSICIÓN DEFINIDA: ¿QUÉ HACER EL 5 DE OCTUBRE?

La experiencia demuestra que atreverse a analizar, a opinar y a presentar propuestas sobre “problemas concretos” no es nada fácil. 

Cuando estos problemas concretos  son verdaderamente  "temas de actualidad" reales,  y no supuestos temas de actualidad imaginados por mentes geniales, el intento de opinar  se hace más complicado.

Y esta  tarea (que a la vez es una responsabilidad de opinar), se complica mucho más,  cuando los problemas  concretos  también interesan y preocupan a la mayoría de la población (y no solo a una minúscula secta de serviles “elegidos”). Si estos problemas concretos les interesan y preocupan a las mayorías, es porque estas mayorías necesitan, y están obligadas a  asumir una actitud determinada (una acción concreta), como es el caso de votar por alguna de las múltiples opciones electorales que se vienen agitando para las elecciones políticas municipales del 5 de octubre.

Este debate (acerca de las elecciones municipales del 5 de octubre) ya no es un debate para “divagar en abstracto”, sino por el contrario un debate muy serio, para asumir una decisión precisa ante la pregunta  ¿Qué hacer el 5 de octubre?:

Entre los varios millones de votantes que vivimos  en Lima, unos dicen “No asistiré  a Votar”, a mí me parece bien; otros ya han optado por el “Voto Viciado” o el “Voto en Blanco”, a mí no me parece mal; y no faltamos quienes, desde hace varios meses atrás, estamos agitando “Votar en respaldo a la lista de Susana Villarán”, por ser la mejor entre  las pocas  listas de candidatos del pueblo que postulan en Lima.

 En mi caso, yo no estoy optando por el  llamado “mal menor”, como  despectivamente lo ha calificado  el periodista César Hildebrandt, desde su punto vista libertario. Por el contrario,  yo considero que votar por los candidatos dirigidos por Susana Villarán es votar  por la mejor opción, entre  las pocas opciones de candidatos que en estas elecciones municipales de 2014 representan a un sector específico del pueblo limeño.

Los socialistas que vivimos en Lima, desde hace mucho tiempo atrás, sabemos que la candidatura de Susana Villarán no representa “a todo el pueblo limeño”, y mucho menos “al proletariado”, eso no está en discusión. Pero  reconocemos que el movimiento que la respalda si representa a un importante sector del pueblo limeño. Y por lo tanto, son nuestros aliados en la lucha contra el enemigo común en la presente jornada de lucha.

“Mal menor” sería optar por apoyar a una lista de  candidatos a sabiendas que son  típicos y reconocidos representantes políticos de la clase dominante (como en su tiempo lo fueron Fujimori en 1990, Toledo en 2000 o Humala en 2011, tres oportunidades, en las cuales sin ninguna duda ni vacilación, yo ejercí mi derecho al Voto Nulo). Pero  este no es el caso de los candidatos que ahora están postulando en la lista de Diálogo Vecinal. Habría que ser un analfabeto político, o ser muy torpe, para llegar a semejante conclusión, y en el colmo del delirio “doctrinarista” llegar a calificar a Susana Villarán de “candidata de la embajada USA” (¿…?), descocada afirmación dicha “con toda seriedad”. Paradojas de la política criolla, en las elecciones de 2010, a la supuesta “candidata de la embajada USA”, entre otras acusaciones y sin ningún sustento la calificaron hasta de “terruca”.

Por otro lado, y desde otras trincheras de la lucha de clases (porque tenemos que reconocer y entender que esta confrontación electoral es una verdadera expresión de la  lucha de clases), unos dicen “Votaré por Cornejo” porque es el candidato que ha presentado  las mejores propuestas municipales;  otros dicen  “Votaré por Salvador Heresi” por ser el más simpático e incluso buen “bailarín”; y tampoco faltan  quienes, desde hace cuatro largos años atrás, están  afirmando  “Voy a votar por la lista de  Castañeda” porque es el candidato que tiene más locales partidarios (lo cual es cierto), que hace más propaganda (lo cual también es cierto, nadie duda que este viejo “zorro” tiene mucha plata disponible para su campaña), y además, por si fuera poco, Lucho Castañeda encabeza las últimas encuestas, y “no importa si roba, pero hace obras” (lo cual también es sumamente cierto).

Y en esta miscelánea de opciones que tenemos por delante, no faltan unos pocos, cada vez menos, que siguen elucubrando mentalmente  “boicotear las elecciones burguesas” y están soñando en salir  a las calles el 5 de octubre para quemar ánforas, a diestra y siniestra.

Éstas, entre otras muchas más, son algunas de las posibles acciones  concretas que se barajan entre la población electora en la capital. Y lo cierto es que, los varios millones de electores residentes en Lima necesariamente  tenemos que optar por una de esas u otras acciones concretas. Lo cual demuestra, y vuelve a ratificar, que estas elecciones municipales son muy democráticas, y  la endeble democracia burguesa hasta se desborda en excesos  por todos lados y para todos los gustos. Nadie puede reclamar que le “han prohibido expresar libremente su propia opinión y sus propuestas”. Más no podemos  pedir.

Cada vez que nosotros conversamos en nuestras  reuniones familiares diarias, o en las reuniones semanales con nuestros vecinos y amigos, o con nuestros compañeros de estudios o de trabajo, no podemos “andarnos con rodeos”, sino que necesariamente tenemos que ser sumamente precisos en nuestras opiniones.

 La inmensa mayoría de la población está acostumbrada y demanda propuestas concretas ante los problemas concretos (a diferencia de algunos pocos “filósofos” que viven encerrados en sus lejanas torres de marfil). Y para poder participar seriamente en estas conversaciones con nuestros familiares y amigos (que indudablemente forman parte del pueblo limeño), nosotros debemos tener una propuesta concreta, “cualquiera que ella sea”.

Sí nuestra propuesta  es correcta o es incorrecta, solamente se podrá demostrar en la práctica, y no con enrevesados juegos y maniobras semánticas (“chamullos” o palabreos que más parecen “cantinfladas”, propias de  quienes hablan o escriben en exceso, pero casi nunca dicen nada, ni tampoco proponen nada).  

Si de dificultades se trata, la dificultad se complica mucho más, cuando algunos pretenden opinar y actuar aprisionados  mentalmente por "anteojeras ideológicas" del pasado, y haciendo malabares semánticas (“cantinfladas”) pretenden meter a la fuerza la actual realidad cambiante de nuestra compleja ciudad, dentro de los estrechos parámetros de la letra muerta de sus lecturas librescas, olvidándose así, del “abc” de la dialéctica materialista, que siempre nos recomienda “análisis concreto de la situación concreta”.

Tal es el caso de los pocos militantes  de algunos  minúsculos  grupos político partidarios, como es el caso de quienes se auto consideran ser los únicos y auténticos "marxistas-leninistas 100 % puros”, o de quienes  se auto proclaman los únicos “socialistas peruanos de hoy”, o de los que pontifican en cátedras sobre "marxismo", etc. Pero ocurre que ninguno de ellos se han atrevido a esbozar  y presentar aunque sea “un mínimo” avance de análisis concreto del presente proceso de lucha político electoral municipal; y por lo mismo, no están en condiciones, ni se han atrevido a presentar una propuesta concreta de acción, que sirva, aunque sea de “material de referencia”, a las amplias masas del pueblo, amplias masas que están luchando por superar el engaño político impuesto por los publicistas de la clase dominante.

De lo que  si podemos estar completamente seguros, es que después del 5 de octubre, los caudillos personalistas de estas minúsculas sectas  serán los primeros en criticar y lanzar largos y aburridos sermones al pueblo “ignorante”, al cual le reclamarán que no supo ejercer correctamente el derecho al sufragio.

EL DERECHO A OPINAR, Y A DISCREPAR, LIBREMENTE.-

Por eso mismo, yo lo felicito a usted, y lo hago públicamente, por haberse atrevido a opinar sobre este  problema concreto de verdadera  y palpitante actualidad, como es la presente lucha político electoral municipal, que irremediablemente concluye este ya cercano 5 de octubre.

Concluye sí, pero para de inmediato dar inicio  a la próxima campaña político electoral municipal que se prolongará  de octubre de 2014 a octubre de 2018, durante 48 largos meses, “ni un mes más, ni tampoco un mes menos”.

Así como yo lo felicito a usted, igualmente yo le digo públicamente, que  no comparto todas sus opiniones y conclusiones (lo cual resulta tanto mejor, porque es muy sabido que “la unanimidad siempre es infecunda”). Pero no nos alarmemos y mucho menos desesperemos. Como éstas son diferencias y contradicciones secundarias (también llamadas en la jerga izquierdista  “contradicciones en el seno del pueblo”), más adelante tendremos tiempo “hasta de sobra”, para ir analizando y comentando “una por una”  todas nuestras  ocasionales diferencias.

Pero si considero necesario adelantar dos observaciones. Yo estoy acostumbrado a exponer mis diferencias y observaciones, porque estoy convencido que esa es la única manera  de poder avanzar en las conversaciones, debates, y llegar a acuerdos serios.

Mi primera observación es la siguiente. Usted ha titulado su mensaje “Carta Abierta de Susana a Lima. Opinión”. Pero en su comentario del día 25, usted no incluye, ni de manera directa,  ni tampoco indirecta (como archivo adjunto), la copia de la mencionada “Carta Abierta de Susana a Lima”.  Usted  ha publicado un texto que mejor lo podríamos llamar  Carta Abierta de Manuel a Lima, lo cual no está mal, por el contrario me parece algo bueno. Pero si usted  acompañaba su carta de la copia de la Carta de Susana a Lima, me parece que hubiera sido un tanto mejor (Yo  he leído en algún periódico la copia de la mencionada carta manuscrita de Susana, pero no tengo la versión digitalizada de ella. Por eso, en este momento, no puedo contribuir a superar esta limitación nuestra).

Mi segunda observación es la siguiente. En el primer párrafo de su carta usted ha anotado “el panorama en general, no pinta muy bien”. Esa visión suya me parece algo pesimista,  e incluso timorata. Posiblemente sea reflejo de la influencia del centralismo limeño.

Si observamos el panorama nacional en su conjunto, podemos estar seguros que en estas elecciones de octubre de 2014, ocurrirá algo similar a lo ocurrido en las elecciones de octubre de 2010. En la mayoría de las cerca de 200 provincias y más de 1800 municipios, los grandes derrotados nuevamente serán los viejos y los nuevos partidos políticos nacionales de la clase dominante, eso por un lado; y por otro lado,  la victoria  electoral nuevamente será de los numerosos movimientos municipales, provinciales y regionales, que ahora expresan los intereses de la amplia, variada, contradictoria  y combativa oposición democrática poblana.

La única excepción, a esta gran derrota política de los partidos nacionales de la clase dominante, parece que podría ser en Lima capital. Por eso, el ataque desesperado y desenfrenado de los voceros políticos  de la clase dominante contra los candidatos del pueblo en Lima. Por eso mismo, se ha formado una “santa alianza” entre El Comercio, Perú 21, La Razón, Expreso, Correo, Ojo, y La Primera (versión bamba) y otros líbelos periodísticos, no solo para atacar y derrotar a la Sra. Villarán, sino para aplastar su candidatura, y así someter y humillar no solo a ella, sino a todo el pueblo limeño.

Convencidos los representantes políticos de la clase dominante,  de que políticamente  van a perder en la contienda electoral en casi todo el país, ellos  necesitan urgente y desesperadamente recuperar el control y la administración del gobierno municipal de Lima. Aparentemente han formado e inscrito varias listas de candidatos, pero solo una de ellas recibe financiamiento a raudales,  y los operadores políticos apro-fuji-castañistas son los encargados de dirigir y cumplir con este plan siniestro.

Por nuestra parte, en la trinchera de lucha del pueblo, nuestro objetivo  debería ser alcanzar una  votación masiva de más de un Millón de Votos en Lima, respaldando a la lista de Diálogo Vecinal, con lo cual nos colocaría a la altura del gran avance político de las fuerzas del pueblo peruano  en todo el resto  del país. 

Y habiendo llegado hasta aquí, me parece necesario esbozar algunas sugerencias de propuestas “para más adelante”. Lo cual lo anotaré en la segunda parte de este comentario. (Continuará)

Atenta y fraternalmente, esperando que otros amigos también se atrevan a leer y comentar su carta del día 25.

Miguel Ángel Aragón
Vecino de Santiago de Surco

Pd.- Por lo general yo acostumbro adquirir las ediciones del diario La República, cada vez que incluyen el suplemento mensual Revista Agraria (que la mayoría de las veces  lo publican el último miércoles de cada mes). Lamentablemente no pude adquirir el último número correspondiente al mes de agosto, en el cual aparecen publicadas declaraciones suyas. Cuando yo disponga de tiempo, y sobre todo de dinero, visitaré  los talleres del diario, para solicitar ese número atrasado.

El Jueves, 25 de septiembre, 2014 22:39:01, "Manuel Alexis Velàsquez Rangel librosunicornioazul@gmail.com[foro_centenario]" <foro_centenario@yahoogroups.com> escribió:

[CARTA ABIERTA DE SUSANA A LIMA. OPINIÓN] (*)

Faltan diez días para elegir o reelegir autoridades municipales y regionales, tanto en Lima como en todo el Perú. El panorama, en general, no pinta muy bien. Hay cerca de 22 presidentes regionales denunciados por corrupción, así como un sin número de alcaldes distritales y provinciales que están en la misma o peor condición. Por otro lado, la afluencia de candidatos sentenciados, procesados, etc., que postulan a los gobiernos locales ha aumentado en forma alarmante. Violadores, vulgares rateros, estafadores, etc., pretenden entrar a saco en el presupuesto público. En estas condiciones, de descomposición social creciente se dan las elecciones municipales y regionales para Lima.

Es evidente que la elección que conlleva expectativa es la que se disputa el gobierno edil de la ciudad capital, opacando a la otra elección en que se juega el destino de la región. ¿Por qué? La respuesta tal vez sea, que la primera es la más política de todas. Siendo la ciudad de Lima la ciudad que alberga a casi un tercio del electorado del Perú, se puede decir que quien triunfe tendrá la llave para que abra la puerta del triunfo en las próximas elecciones generales del 2016, ésta es su importancia en términos electorales, políticos.

Susana Villarán ganó en forma sorpresiva la elección pasada (octubre de 2010), y se salvó por un pelo en la consulta por la revocatoria (marzo de 2013). Ha gobernado Lima sin aparato propio, puesto que su partido Fuerza Social es apenas un minúsculo grupo político. Esto hace que no tenga operadores de confianza en los distintos sectores de la población y que tenga que recurrir a ampliar la burocracia con gente de diversas convicciones, muchos de ellos partidarios de los enemigos del actual gobierno municipal. Ejemplo de esto es la consulta por la revocatoria, en la cual, en el Gran Mercado Mayorista de Santa Anita, la mayoría estaba por el SÍ. Y nadie, salvo unos pocos, muy pocos, que se jugaban por el NO. Se desperdició una gran oportunidad de organizar a los comerciantes y trabajadores en general en torno de Fuerza Social, teniendo en cuenta la futura campaña de reelección.

¿Por qué esto es así?  La respuesta está en la posición histórica en que se encuentra Susana Villarán, nieta del ilustre educador Manuel Vicente Villarán que figura en los 7 Ensayos. Esta posición política es de reforma no de revolución, lo que condiciona su espíritu y su mente a una actitud de recelo con relación a los sectores proletarios y viceversa. Por ejemplo, en estos dos años de funcionamiento del Gran Mercado Mayorista de Lima, las veces que ha ido la alcaldesa ha sido a las oficinas, o a alguna ceremonia puntual, pero no la he visto recorrer a pie los Pabellones, sobre todo en las frías madrugadas del invierno de Lima, más frías aún sin el público comprador que, por ahora, prefiere ir a los alrededores de la ex-Parada donde se ha incrementado el negocio mayorista informal e ilegal en forma exponencial. Aparte de los otros Mercados Mayoristas paralelos como los dos Unicachis, tanto del Cono Sur como del Norte, y pare de contar.

No obstante, hay que reconocerle el valor moral y político de acometer semejantes empresas dignas de un Don Quijote. Me refiero a la Reforma del Transporte, otro sector en que el enfrentamiento con las mafias y con la cultura mafiosa es directo. Y se nota. Por eso, la pregunta correcta al favorito de la encuestas es: si gana, digo es un decir, ¿volverá Orión? ¿Volverán a levantar la Parada? ¿Condenaran al GMML a ser un Mercado Local? ¿A ser un elefante blanco que languidezca en medio de la nada?

El candidato favorito de las encuestas, el señor Luis Castañeda Lossio, es, aparentemente, una gran interrogante, pero esto es sólo aparente, pues a poco que pensemos y analicemos, y sobre todo, intuyamos, nos daremos cuenta que será un gran retroceso para el movimiento social. El caso Comunicore, según lo demuestra el informe de la revista Poder en su última edición y luego corroborado por el diario La República, no sólo es un escandaloso caso de corrupción, es decir, de robo, sino, lo que es peor, un escabroso caso de lavado de activos del narcotráfico. Los personajes más cercanos, por años, al candidato edil, están siendo investigados por el tema; cuatro ex-gerentes, el abogado del municipio de esa época, los dos primos Belaúnde Lossio, etc., Y él “no sabe nada de nada”. Como bien apunta el sicoanalista Jorge Bruce, Castañeda no ha negado enfáticamente los hechos, sino que ha dicho: "...es muy difícil que puedan relacionarme..." Difícil pero no imposible. Y difícil ¿por qué? Porque se ha cuidado muy bien de no dejar pruebas como su maestro y mentor el señor Alan García y los fabulosos narcoindultos?

¿Por quién debe votar el pueblo de Lima? ¿El proletariado limeño? ¿Los luchadores sociales, los revolucionarios, los socialistas, comunistas o libertarios? O votar en blanco, viciado, o no votar, como dicen los que niegan (la burguesía niega, el proletariado afirma).

No sólo debemos votar por Susana Villarán, sino que debemos apoyarla, participar, en esta recta final. Faltan diez días, y a despecho de aquellos periodistas de izquierda que “ya la dan por muerta”, esta vez, yo tengo fe que el electorado limeño, mazamorrero y migrante, le dirá “no a las mafias”, “no al narcotráfico”, “no a los reaccionarios”, y “sí a las Reformas que cuando son con mayúsculas sirven a la Revolución que, como enseñara el Amauta: "...será para los pobres no sólo la conquista del pan, sino también la conquista de la belleza, del arte, del  pensamiento y de todas las complacencias del espíritu..." (Ver libro Mariátegui Total. T1.pág.992).

Santa Anita, 25 de Setiembre del 2014.

Manuel Velásquez Rangel.

(*) Nota de Miguel Aragón.- Este título colocado “entre corchetes”, no aparece en el texto original de Manuel Velásquez. Pero si aparece, como  el nombre del “Asunto” de su mensaje.
Por otro lado, después de leer varias veces el texto de Manuel, me he tomado la libertad de “editar” algunas palabras y signos, sin modificar en lo más mínimo el contenido del texto. Ojalá que otros lectores lean con atención las opiniones y propuestas de Manuel, y se atrevan a seguir su ejemplo y expresar su propia opinión al respecto. Si es discrepante, tanto mejor. Lo peor que le podría ocurrir a Manuel, es que nadie lea, que nadie  comente sus opiniones, y que nadie exprese aunque sea una mínima discrepancia.


No hay comentarios: