MARCHA POR LA DIGNIDAD

El pueblo tacneño en su integridad, responde contundente y masivamente continuando el paro indefinido. Los que acostumbrados están a caminar de rodillas creen que con Estados de Emergencia van a amedrentar a Tacna. Se equivocan y se seguirán equivocando.

Los últimos acontecimientos llaman a la reflexión y, por supuesto, a la acción. La inacción no es madera de tacneños. Nuestros tatarabuelos, bisabuelos y abuelos fueron hechos de un roble especial. Luchadores y pensadores, hacedores de caminos con metas claramente definidas, amables y atentos con los visitantes pero indoblegables e infatigables cuando las necesidades de su tiempo lo exigen. Criollos como Francisco Antonio de Zela, Paillardelle, Calderón de la Barca, Francisco de Paula González Vigil, Jorge Basadre, etc.; Aymaras como los Ara, Copaja, Gómez, y tantos otros Quispes y Mamanis escribieron y escriben nuestra historia con su caminar siempre erguido jamás de rodillas. Nuestro pueblo, cuando la ignominia y la arbitrariedad progresa y se disemina como enfermedad infectocontagiosa, sabe responder como responden los  hombres y mujeres de éste último rincón del Perú: de Pie.

En cinco años celebraremos el Bicentenario del Grito de LIBERTAD.  Francisco Antonio de Zela y los caciques Ara y Copaja, un 20 de junio encabezaron la primera rebelión contra el dominio español. Derrotado Zela, un año más tarde, Enrique Paillardelle, Pedro Calderón de la Barca, el empecinado Goméz, toman la posta. Hace 195 años los  administradores de España eran incapaces de contener el movimiento libertario. Dejemos que sus propias palabras grafiquen el panorama de aquél entonces: “Se con toda evidencia a quién y por quiénes son remitidos los papeles subversivos con que está inundada la plaza, y esto lo sabe el mismo Virrey del Reino, pues es tan grande el número de comprometidos en este negocio, que para corregir medianamente el mal sería preciso meter en la cárcel a medio Tacna” (Antonio Rivero y Araníbar, Subdelegado realista en Tacna). Pues sí. Ayer para “corregir” el desorden en éste rincón del Virreinato. Hoy, para  “ajustar cuentas con los tacneños revoltosos” declaran Estado de Emergencia. Pero, ayer como hoy, criollos y aymaras levantan su voz en protesta.

La libertad es un principio que no se le puede limitar al tacneño. Tacna es un pueblo que no sabe vivir de rodillas. Tacna es un pueblo donde la LIBERTAD viene en los huesos de cada niño (a), de cada joven, y de todo adulto. Tacna es un pueblo multiétnico, multicultural, que no puede vivir en libertades restringidas. España ni Chile pudieron someter el espíritu indoblegable de Tacna. Ejércitos extranjeros no lo lograron. Menos podrá hacerlo nuestro propio Ejército. 50 años de ocupación Chilena mostró al mundo el coraje y dignidad de Tacna. Antes de ayer, nuestros bisabuelos: se levantaron contra España. Ayer, nuestros abuelos en la histórica procesión de la bandera, reivindicaron en plena ocupación chilena el derecho a pensar con cabeza propia, el derecho de ser peruanos. Hoy, los acontecimientos, nos colocan nuevamente en la circunstancia que Criollos y Aymaras, como un solo puño, reivindiquemos nuestro derecho a la LIBERTAD.  Un pueblo digno sabe hacer respetarse. Marchemos multitudinariamente. Los ancianos, adultos, jóvenes y niños con una mordaza y los puños amarrados demostrarán al mundo que Tacna no se rinde. Pongamos en marcha la caminata de la mordaza. Que cuatro Banderas Peruanas desde los cuatro puntos cardinales encabecen la marcha del silencio. Demostremos al mundo que ningún Estado de Emergencia puede detener el derecho de Tacna a Protestar. Tacna No se rinde.

Edgar Bolaños Marín

DNI 00475040

07/11/2008

Nota aclaratoria:

Después de las jornadas de lucha contra la disminución del mal llamado “canon minero” que culminaron en el incendio de la Prefectura, el 31 de octubre del 2008. El gobierno de Alan García y su asistente Yehude Simon declararon en Estado de Emergencia las cuatro provincias de la Región Tacna. Una semana más tarde un grupo de dirigentes de la CGTP – Tacna acordaron promover una Marcha del Silencio en momentos que la ciudad prácticamente estaba tomada por tanquetas, soldados y policías. Testimonio de esa decisión es el llamamiento que reproducimos líneas arriba que fue difundido a través  de Radio Uno, Radio Caplina y otros medios locales. Este llamamiento sólo tuvo eco en una inusual y desproporcionada concentración de soldados y policías en todo el perímetro de la Plaza Zela. Testigos presenciales de los hechos son los compañeros César Vargas de la CGTP, Ronald Paucar de la UNJBG y quien escribe estas líneas que vieron pasar la moto triciclo de un compañero, que siempre está en las movilizaciones del pueblo, con la bicolor flameando al son el himno rojo de Federico Barreto.

T. 26 mayo 2015

EBM